Lanza tu negocio digital rápido y barato

Primero hay que buscar el problema que queramos resolver y encontrar la idea que pueda resolver este problema.

Una vez identificado el problema es necesario realizar un análisis del mercado para encontrar competidores e ideas similares.

¿Cómo se está solucionando este problema actualmente? ¿Podemos mejorar esta solución?

Entonces hay una oportunidad de negocio.

Cuando la idea ya está definida y el mercado ha sido analizado, hay que crear un producto mínimo viable que nos permita testar/validar la idea de forma rápida y barata.

Es mejor fallar pronto y no invertir mucho dinero hasta que la idea esté validada. Así podremos iterar y replantear la solución que resuelva nuestro problema. De esta forma el producto se ajustará a las necesidades de los usuarios y tendrá más posibilidades de éxito.

• Funcionalidad: Lo principal del MVP es que sea una versión mínima funcional del producto. 
• Fiabilidad: Por mucho que se trate de una versión reducida con características limitadas, ésta tiene que ser totalmente fiable, ya que los usuarios van a depositar su confianza en este producto.
• Usabilidad: Debe ser fácil de usar y tener una buena experiencia. Será la primera experiencia que tengan los clientes con nuestro producto y debe dejarles satisfechos.
• Diseño: Lo ideal es crear una marca desde el primer momento, y desarrollar el producto siendo fieles a la marca creada (nombre, estilo, colores, etc.).

Debemos dar a conocer nuestro producto. Primero entre familiares y amigos, y después con todas las personas que podamos. 

Una de las técnicas más recomendadas para adquirir usuarios con un bajo coste es el denominado Growth Hacking. Este método combina técnicas de Marketing, Psicología, Experimentación, Análisis de Datos, Tecnología y Automatización de procesos.

Para empezar es recomendable disponer de:

RRSS: Aquellas donde estén nuestros usuarios potenciales.

Blog: Para atraer tráfico a nuestra landing page.

Anuncios: Lo ideal es realizar anuncios en diferentes plataformas y testar las que funcionan mejor.

Una vez hayamos validado el producto es el momento de hacerlo crecer añadiendo más funcionalidades que sigan aportando valor. 

De esta forma conseguiremos crear un negocio que funcione desde el primer día y siga creciendo poco a poco, con nuevas funcionalidades, más usuarios y, si somos afortunados, con mayores beneficios.